La presoterapia consiste en la aplicación de presión estratégica para realizar un drenaje linfático mediante un traje neumático que hace masajes de compresión y descompresión sobre los tejidos a tratar.
Para poder realizar este tratamiento, se cubre el cuerpo con un traje de pies a brazos. Este traje emplea cámaras de aire que aplican presión para realizar un masaje neumático. Aunque el traje está pensado para cubrir todo el cuerpo, puede usarse también en zonas concretas como brazos o piernas, por ejemplo.
Los beneficios de la presoterapia
A través del masaje que realizan las cámaras de aire, se aceleran los procesos metabólicos y los que se encargan del drenaje. Además, se produce una notable mejora en la circulación de la sangre, puesto que el tratamiento consigue un retorno venoso más rápido. De ahí que los cambios de la presoterapia antes y después sean bastante evidentes.
Durante la sesión de presoterapia, lejos de resultar doloroso, lo que produce en quien la toma es una sensación profunda de relajación y bienestar. Esta presión alivia los músculos como si se tratara de un masaje y se consigue aliviar el estrés. Además, puesto que estamos hablando de un tratamiento no invasivo, se pueden tomar estas sesiones hasta dos veces por semana. Respecto a la duración del tratamiento, por lo general estas se sitúan entre la media hora y los sesenta minutos, aunque el tiempo de duración de las sesiones dependerá de muchos otros factores.
La diferencia en la presoterapia antes y después se aprecia claramente en los resultados que se obtienen tras la intervención, al hacerse visibles todos los beneficios obtenidos. La capacidad de eliminar líquidos y toxinas es uno de los mayores atractivos de esta terapia basada en la presión, pero sus virtudes van mucho más allá.
Piel más lisa
Una vez finalizada la sesión se nota una mayor firmeza y relajación en piernas, abdomen y brazos. Además, con esta terapia se potencian los efectos de cualquier otro producto o tratamiento estético que estemos utilizando. Es por este motivo por el que se puede combinar esta terapia con tratamientos para combatir la celulitis y, de esta forma, potenciar los resultados.
Mejor recuperación física tras el parto
Muchas mujeres que acaban de dar a luz están preocupadas porque su figura ya no es la misma. La presoterapia promueve la recuperación en este sentido, ya que se eliminan edemas y linfedemas. Así, no solo puede resultar de gran ayuda para las mujeres que han tenido un parto, sino que también puede resultar útil tras tratamientos de liposucción o ciertas operaciones.
Estimula la circulación
El tratamiento de presoterapia sirve para estimular y mejorar la circulación. Esto suele conllevar otros efectos positivos, como la mejora de la oxigenación, el tono y la firmeza de la piel. Además, gracias a que se estimula la circulación, también mejora el funcionamiento del sistema inmune.
¿Cuándo se empiezan a notar los efectos de la presoterapia?
En la presoterapia antes y después se pueden apreciar varios cambios y además bastante inmediatos. De hecho, al finalizar la sesión se evidencia una piel mucho más lisa y se elimina la sensación de piernas cansadas, reduciéndose así la fatiga muscular.
Por otro lado, es una buena aliada para favorecer el aspecto de la piel de naranja, ya que ayuda a conseguir una piel más tersa y luminosa. También es una buena opción para mejorar el curso de los trastornos venosos, y evita que aparezcan varices. Asimismo, el tratamiento reduce la inflamación y la hinchazón de la zona del abdomen, en piernas y en los brazos, causada por la retención de líquidos.
¿Cuántas sesiones de presoterapia son necesarias para ver resultados?
Lo cierto es que no hay un mínimo de sesiones imprescindible, aunque los profesionales de la medicina estética no invasiva suelen recomendar entre 10 y 12 sesiones de presoterapia para conseguir todos los beneficios. Así, con esta cantidad de intervenciones se logran mejores resultados a la hora de reducir la flacidez, la celulitis y la grasa acumulada.
Por lo que respecta al precio de la presoterapia, este dependerá de cada centro especializado en medicina estética. No obstante, cada sesión puede rondar cerca de los 25 o los 30 euros. No obstante, como hemos dicho, el coste puede variar en función de cada clínica.
¿Quién no puede hacer presoterapia?
Como ocurre con muchos otros tratamientos, la presoterapia no es apta para todo el mundo. En los casos en que se dan los siguientes tipos de problemas de salud, enfermedades u otras patologías, no se indica realizar este tipo de tratamiento:
- Pacientes con problemas circulatorios.
- En casos de problemas cardíacos, de hipertensión e hipotensión.
- En pacientes con trombosis venosa profunda, tromboflebitis superficial o insuficiencia arterial.
- Si se presentan infecciones o inflamaciones en la piel.
- Si existen problemas de hipotiroidismo.
- Pacientes oncológicos.
Los tratamientos de medicina estética no invasiva cada vez avanzan más, por lo que resulta más fácil encontrar técnicas sencillas y embellecedoras para solucionar varios tipos de problemas e imperfecciones. La terapia basada en la presión es una de ellas, pero también encontramos la cosmética y los tratamientos faciales, entre otros tratamientos estéticos corporales.